Hay que vencer los propios demonios es la enseñanza de este nuevo exito de King.
El protagonista es un niño con una habilidad especial, logra comunicarse con las personas muertas en los minutos siguientes a producida esta y logra hablar con ellos que por una ley cosmica tienen que decir siempre la verdad.
Si bien su madre al comienzo cree que su niño inventa con el tiempo pruebas irrefutables hacen que le crea, sobre todo cuando un problema economico la mueve a utilizar su servicio. De alli en mas es utilizado por una policia y la trama empieza a mezclar con habilidad policias corruptos, traficantes de drogas.
El pequeño se convierte en un adolescente y como tal desea una vida normal: amigos, novias pero es una tarea que pareciera imposible porque el mundo sobrenatural le tira de las piernas.
Seguir contando la trama no tiene mucho sentido...como toda novela de terror hay que dejarse llevar por ella para observar el perfecto equilibrio entre el terror y lo policial que tan bien maneja un escritor de este calibre.
Quizas no sea su mejor novela... pero ojala despues de leerla puedas dormir
